En un diminuto genial mundo (la Ciudad Maravilla) a donde el malecon se eterniza como frontera desplazandolo hacia el pelo trasfondo

En un diminuto genial mundo (la Ciudad Maravilla) a donde el malecon se eterniza como frontera desplazandolo hacia el pelo trasfondo

y no ha transpirado a donde la leyenda ondula formando volutas creadoras de sincronismos, y no ha transpirado donde la amenaza de lo azaroso penetrante (tan oscuro como excesivamente oscuro) se alza parecido a aquella forma sobre la guillotina cruzando el mar, en El siglo de las luces, la celebre novela de Alejo Carpentier, en un mundo de este modo el sexting es una ocupacion tan irracional como liberadora, tan inutil igual que reconfortante.

Ya se conoce el sexting es una fortuna de alivio/umbral que se juzga universo paralelo, y no ha transpirado a donde la ejercicio de el sexo ocurre en la dimension de el trueque de terminos. La voz no debe intervenir, pero en ocasiones lo permite sobre un forma inevitable. Escritura igual que voz falto marcas comerciales de entonacion. Desplazandolo hacia el pelo voz como escritura marcada. Cuando es necesario, a esa contaminacion se anade la imagen.

En estas hoscas y fastidiosas situaciones en que todo da la impresion repetirse en la especie sobre publicacion corregida y no ha transpirado aumentada sobre un preterito sin la inferior ventura (estoy glosando una de las clases en que acostumbra vaticinar el I Ching), la localidad Maravilla hace del sexting un lugar de donaire asi­ como interes, de aventura asi­ como exorcismo.

El sexo y las terminos todo el tiempo se han llevado bien, cuando se llevan

En Cuba, en la actualidad, el sexting quizas sea la contingencia estupenda. Asi­ como, por ejemplo, Con El Fin De alguno que se dedique en ceremonioso a la literatura y posea la pensamiento astuta y vivaz y le interese la comunion inflamada y luminosa (estoy estando un poquito kitsch con toda intencion) entre el sexo asi­ como el estilo, el sexting seria la oportunidad sobre entrar en un universo dominado por la liberaciin total, igual que puede suceder en el sexo asi­ como las aledaios (pero los aledaios sean arrabales inseguros asi­ como peligrosos).

No es que el sexting de buenas a primeras sea literario, aunque si Existen literatura en el En Caso De Que se lo observa desde exacto angulo.

Que circunstancias rodean al sexting Hoy? Tengamos en cuenta que se alcahueteria de la praxis matizada debido a insular, bajo el gloria de el Caribe desplazandolo hacia el pelo en el lugar historico de En la actualidad similar. En caso de que afuera sobre indole continental, semejante oportunidad habria alla hasta una dosis sobre circunspeccion. Aunque no. El sexting en La Habana seri­a perentoriedad, calculos rapidos y no ha transpirado audacia imprudente.

Aparte, imaginense ustedes las circunstancias sobre que hablo las celebraciones en torno a la Virgen sobre la Caridad, la “coyuntura” de la crisis energetica, la desaparicion casi absoluta sobre reparto publico, el alza sobre las casos sobre dengue, las pavorosas trivialidades de el concurso “Adolfo Guzman” y no ha transpirado, si me apuran, hasta el centenario de el alumbramiento sobre Chavela Vargas.

Todo esto deviene recogimiento, reclusion grupal (la horda, la tribu), aislamiento liga al telefono, humedecimiento epitelial, masturbacion, cuadres (de citas) desplazandolo hacia el pelo orgasmos. Nunca todos los orgasmos suponen la asistencia del sexting, pero si la totalidad de las practicas sobre sexting bordean desplazandolo hacia el pelo conducen al orgasmo (o a su exploracion).

La Virgen, Dios me perdone, seri­a devocion, mulatez exquisita asi­ como sensualidad jugosa. He escrito en muchas pieza que la Virgen seri­a un estado cuantico de la imaginacion, pero igual podria senalar que la Virgen es un estado cultural ensanchable, en el que la Cecilia Valdes sobre Cirilo Villaverde accederia (forma en apariencia, maneras sobre maneras) al siglo XXI y no ha transpirado se cruzaria con el fervor popular a lo largo de tantisimos anos de vida.

Eso seri­a cubania, creo. Cubania igual que fe en una cosa que anhela ser muy particular. Fe no en un periodo de la biografia ni en muchas cojeante utopia o programa social, sino en ese comun amistoso, leal y estable de las “cosas” que conforman la Nacion. De modo que el sexting nunca sera, por supuesto, la Nacion, aunque la novia cerca de, de cierto estilo de clase baja, en el sexting.

Mas alla de el dengue, la gasolina y las colas (de 3 cuadras desplazandolo hacia el pelo mas) Con El Fin De comprarla, la Virgen, espectador desplazandolo hacia el pelo objetivo indirecto sobre pretension, se corporiza evanescentemente, por mismamente aseverar. Igual que Cecilia Valdes, que es una tipologia. (A objetivo Cecilia Valdes, Elpidio Valdes desplazandolo hacia el pelo Panfilo son los tres personajes de ficcion a donde se podria resumir lo cubano. Aunque las explicaciones acerca de lo cual nunca caben aca ni Actualmente).

Un joven amigo repleto de referencias culturales desplazandolo hacia el pelo de pasion libresca, sobre vida literaria asi­ como sobre sexualidad nutritiva, me ha proverbio que el sexting no le da la impresion fructifero. “No le veo el ventaja ni la gracia”, observo con mucha conviccion. Asi­ como adquirio, detras de decir eso, un matiz anomalo, igual que sobre ruso ordinario.

Cuando se publica poesia erotica o sexualizada, la mayor parte de las veces hay un concubinato perverso e hipocrita con el publico

Erecciones, disimulos, breves interrogatorios referente a gustos practicos, combinaciones sobre posturas, urgencia asi­ como angustia del condon, tener asi­ como no tener sitio para hacer, morboseo indirectamente competitivo, frases perifrasticas e incoativas. Detenerse en el limite anteriormente de realizar alguna cosa. Imaginar ese alguna cosa. Aplazarlo con gusto desplazandolo hacia el pelo con el beneplacito sobre un yo que se prepara Con El Fin De lo conveniente. La incoacion es el acto entre el afan y la espera.

La cobardia o el temor o la moderacion ninguna cosa tienen que ver con el sexting en La Habana. He conocido una decorado sobre zorreo (si de este modo pudiera nombrar a esa mixtura de ligue refinado y comedia simpatica) entre dos jovenes. Individuo, en el recibidor del hotel Capri . El otro, en la entrada del restaurante Club 21, que queda justamente enfrente. Ambos con las telefonos. Ritual sobre apareamiento.

En la cinta de Orlando Rojas Una novia Con El Fin De David, la gordita Ofelia le dice a este “Un cubano cobarde? Nunca pega, David. Desde Maceo no pega”.

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